Un científico decide probar una vacuna contra una grave enfermedad, realizada con isótopos radioactivos, aplicándosela a unos presidiarios, con la promesa de que serán puestos en libertad tras el experimento. Desgraciadamente, los efectos de la vacuna son imprevisibles y provocan los instintos asesinos de uno de ellos, el cuál mata a un compañero. Aún así, el doctor hará todo lo posible por continuar con el experimento, a pesar de la oposición del gobierno.