En el siglo pasado el párroco del pueblo de Briarville, el reverendo Phineas Warren, logró capturar al troll Trantor, una monstruosa criatura que atrapa niños y los convierte en muñecos enterrándolos bajo un roble. Antes de ser sepultado, Trantor lanza sobre él una maldición: sus descendientes serán cada vez más tontos.