La Unidad continúa con su misión para dar caza al grupo de insurgentes que mantiene secuestrada a Betsy, la hija de Jonas, y a otros compañeros. Actúan a contrarreloj, ya que los terroristas piensan matar a un rehén por hora. Por ello, Jonas está dispuesto a todo con tal de encontrar información sobre su paradero. Su persistencia le llevará a una localización clave. Mientras, el coronel Ryan, arrepentido por sus actos y por haber traicionado a sus hombres, se encuentra infiltrado entre los secuestrados intentando mantener con vida a Betsy.